Los productos que podemos llegar a almacenar en un centro de distribución, suelen ser extensos, ya sea por cantidad o por modelo, etc., por lo que contar con herramientas para su ubicación y gestión, hoy en día es más que indispensable.
Un claro ejemplo de estas herramientas es el Stock Keeping Unit, por sus siglas en inglés SKU number, o también conocido como número de referencia, unidad de mantenimiento en almacén, entre otros nombres.
Uno de los ámbitos donde más se utiliza este método de seguimiento es en la gestión de inventarios, en donde llevar el control de cada una de las unidades en existencia, disponibles y almacenadas es clave para su administración.
Este número permite identificar cierto artículo, producto, o servicio en un lugar determinado y es utilizado en el ámbito comercial. El SKU son las diferentes presentaciones con las que se mueven las referencias (kg, litros, número de cajas, pallets, etc.) de un producto en la cadena de suministro. Las referencias se diseñan en base a criterios comerciales y/o de facturación, pero estas no son la forma más adecuada para su transporte o almacenamiento.
Por eso en la cadena de suministro se suele tratar con diferentes agrupaciones de referencias a las que se le asigna un SKU.
Además, este identificador sirve para dar un seguimiento de manera sistemática, y localizar fácil y rápidamente, cualquier producto o servicio ofrecido a los clientes.
Cada empresa puede diseñar su propio sistema de asignación de SKU a sus productos, pero debe asegurarse de ser consistente y de que sea fácil de identificar.
Para crear un SKU, es recomendable que sea conformado por elementos que puedan identificar el producto, es decir, puede aparecer la primera letra del nombre del artículo, se pueden establecer número invariables para los colores, e incluso añadir la talla, unidades de medida, tanto en forma de número o de letras.
Por ejemplo: Un par de tenis para entrenar en color negro modelo Pegasus, marca Nike y de la talla 25, podrían tener este SKU: NIKE-PEG-NE-25.
Como en el ejemplo anterior, en muchos casos el SKU hace referencia a objetos o productos físicos, pero no siempre es así; en muchas ocasiones se refiere a entidades facturables como pueden ser garantías, procedimientos de instalación o cargos de envío.
Es importante mencionar que las empresas que utilizan SKU en sus productos, son los encargados de establecer los números según su criterio, además, de tomar en cuenta las políticas de almacenamiento de datos de cada empresa.